Hay algo mágico e inspirador que se despierta al encender una vela y observar su llama. Sentir el calor que desprende, percibir su aroma y escuchar el choque del fuego con el viento hace que se convierta en una acción contemplativa que nos induce a un estado de relajación y concentración hechizante.
La luz de la vela siempre ha sido considerada un símbolo de iluminación espiritual entre las diferentes culturas, siendo un acompañamiento de la oración y la magia durante miles de años. Pueblos primitivos danzaban y cantaban alrededor del fuego para conectar con el universo; los grandes sabios iluminaban sus pensamientos con el poder de las velas; y grandes religiones asocian al fuego con lo divino, como un medio para elevar sus oraciones. Hoy en día, quizás de una forma más simplificada y fugaz, utilizamos las velas para desear un feliz cumpleaños.
El hecho es que existe una fascinación hipnótica que produce la llama en el ser humano. La llama parece encender algo que está en lo profundo de nosotros y nos conecta con toda la humanidad y lo infinito. La relación entre el alma humana y una vela prendida en la oscuridad, recuerda el poder del espíritu humano y cómo este tiene la habilidad de convertir la oscuridad en luz.
En la meditación, existe una técnica utilizada para inducirnos en el arte de la iluminación y el control de la mente que consiste en poner toda la atención en un objeto fijo, en este caso la luz una la vela, y centrar la mirada en ella. La meditación con velas rige su fuerza en el fuego y su poder enigmático y atrayente que nos ayuda a centrarnos en él, ahuyentando cualquier otro pensamiento distractor o incluso negativo.
Las velas que son encendidas con un propósito específico se convierten en herramientas poderosas que nos permiten sanar a través de la mente. Esto se debe a que la persona que hace la petición o intención se concentra en el resultado deseado, lo cual transmite al subconsciente el deseo de la vela. Mientras esta arde, la petición es enviada al universo, donde será manifestada. La vela es la conexión entre la mente de la persona y la mente universal.
Si sientes el llamado hacia la meditación con velas, este espacio es para ti. Te invitamos a conocer cómo iniciarte en esta práctica meditativa y a cómo intencionar tu vela mágica.
Referencias: Magia con velas para principiantes (2005). Richard Webster. Ediciones Kepler, Madrid, España.
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